El COVID-19 cambia el escenario al que los jueces se enfrentan y obliga a replantearse estrategias en vacunación frente a enfermedades ya conocidas

El COVID-19 cambia el escenario al que los jueces se enfrentan y obliga a replantearse estrategias en vacunación frente a enfermedades ya conocidas  

 

 

  • El encuentro virtual con expertos ha clausurado el curso de vacunación, con más de 2.000 enfermeras inscritas, puesto en marcha por el Instituto de Formación ISFOS con la colaboración de Pfizer.
  • Durante el encuentro, las enfermeras y enfermeros han podido interactuar en directo con los expertos sobre cuestiones como la posibilidad de obligar por ley a los ciudadanos a vacunarse, la prevención de complicaciones del COVID-19 gracias a la vacuna del neumococo, nuevas estrategias de vacunación frente al meningococo en lactantes o la vacunación masiva frente al coronavirus.
  • Se trata de una acción formativa gratuita impulsada por ISFOS, Instituto de Formación del Consejo General de Enfermería, a la que seguirán nuevos ciclos educativos disponibles para todas las enfermeras españolas.
  • Pilar Fernández, directora de ISFOS: “La vacunación es un acto cien por cien enfermero y la formación continua en este campo es esencial, especialmente este año en el que ha habido grandes novedades”.

El abordaje multidisciplinar de la vacunación en plena pandemia ha centrado el webinar con el que ha culminado el curso “Vacunación: nuevos escenarios y nuevos tiempos”. Un proyecto formativo que el Instituto de Formación del Consejo General de Enfermería, ISFOS, ha puesto en marcha de forma gratuita para todas las enfermeras con el objetivo de analizar en profundidad aspectos clave de la vacunación en una situación tan cambiante como la actual y que van desde el marco legal o la importancia de la inmunización frente al neumococo y el meningococo a las campañas y estrategias frente al COVID-19.

 

Más de 2.000 enfermeras inscritas

Al curso, que ha contado con la colaboración de Pfizer, se han inscrito más de 2.000 enfermeras que, previamente al webinar y a través del aula virtual de ISFOS, habían podido profundizar en los cuatro bloques de que constaba el temario.

Cada bloque ha corrido a cargo de un experto en la materia y todos ellos han participado en el webinar durante el cual los alumnos han podido transmitirles sus preguntas en directo.

Como explica Pilar Fernández, directora de ISFOS y vicepresidenta del Consejo General de Enfermería, “nuestro objetivo es que las enfermeras tengan acceso a una formación que les sea útil en su día a día, adaptada a la situación en que nos encontramos, que sea práctica e innovadora y, para ello, contamos no sólo con los mejores expertos en cada materia sino también con las herramientas necesarias para que el tiempo y los horarios no sean un problema”.

“Estamos muy satisfechos de la acogida que ha tenido este curso que hoy culmina y que es el primero de un ciclo de cuatro que tenemos previstos en vacunación. La vacunación es un acto cien por cien enfermero y creemos que la formación continua en este campo es esencial, especialmente, este año en el que ha habido grandes novedades por la llegada de las vacunas frente al COVID-19 y en el que otras vacunas se han visto afectadas de uno u otro modo por la situación de pandemia”, ha añadido.

Expertos

Los profesores del curso y ponentes de este webinar, que ha sido moderado por Íñigo Lapetra, director de Comunicación del Consejo General de Enfermería, han sido cuatro expertos en las distintas materias que se han abordado.

De un lado, César Tolosa Tribiño, presidente de la Sala 3ª del Tribunal Supremo, ha sido el encargado de analizar el marco legal de la vacunación en el momento actual, ha explicado a qué situaciones se están enfrentando los jueces en los últimos meses y ha planteado varios supuestos que hasta ahora no se habían contemplado y en los que ya hay que empezar a pensar.

Por su parte, Esther Redondo Margüello, jefa de Sección del Centro de Salud y Vacunación Internacional, se ha referido a la vacunación frente al neumococo en un momento en el que la prevención de la neumonía, especialmente en población vulnerable, adquiere una especial relevancia.

Walter Goycoechea, pediatra del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, se ha centrado en la protección frente al meningococo ACWY en el lactante.

Y la perspectiva enfermera ha venido de Raúl Ayala, enfermero del Centro de Salud Sardinero en Cantabria, que se ha centrado en las estrategias de vacunación frente al COVID, en la vacunación masiva en pabellones y estadios y en el papel clave de las enfermeras y enfermeros en todo este proceso.

Todos ellos han interactuado con los asistentes durante este encuentro virtual en el que estos les han hecho llegar cientos de preguntas.

Marco legal

Como ha explicado el magistrado durante su intervención, “la vacunación es un tema eminentemente sanitario y científico que, en este momento, ha adquirido una relevancia social de tal calado que también implica decisiones desde el punto de vista jurídico”.

Hasta la pandemia, ha subrayado, la intervención de los jueces en cuestiones relacionadas con las vacunas solía estar circunscrita a grupos antivacunas o progenitores que se negaban a vacunar a sus hijos. Sin embargo, en los últimos meses hemos visto aflorar otras cuestiones en las que la justicia ha tenido que intervenir, concretamente, de hijos que se negaban a que sus padres, de los que eran representantes legales y se encontraban en residencias, fueran vacunados. Hasta el momento, ha explicado César Tolosa, “los jueces han adoptado la decisión de que, no existiendo ninguna contraindicación para la dispensación de la vacuna, lo fundamental es preservar la salud de esas personas mayores por encima de las alegaciones de sus representantes”.

Asimismo, se ha referido a la obligatoriedad de la vacunación por ley, un tema que, ha dicho, sería factible ya que está contemplado en determinados supuestos en los que la pandemia por Covid-19 encajaría a la perfección. Sin embargo, la predisposición de la población a vacunarse es tal, llegando incluso a saltarse la lista establecida, como desgraciadamente se ha visto, que no parece que vaya a constituir un problema.

No obstante, sí podría surgir un supuesto al que hasta ahora no nos habíamos enfrentado: la pérdida de oportunidad. “El problema que puede surgir es que, si no hay vacunas para todos, haya personas que contraigan la enfermedad e imputen la responsabilidad a la Administración sanitaria por no haberle dotado de los medios necesarios”, subraya César Tolosa.

 

 

Neumococo

En su intervención, Esther Redondo se ha centrado en “la importancia de prevenir infecciones respiratorias como la infección neumocócica o la infección gripal en este contexto Covid para evitar una saturación aún mayor del sistema sanitario”.

Y es que, como ha explicado, “el neumococo es el germen que más frecuentemente sobreinfecta a pacientes hospitalizados críticos por el SARS-COV 2” y sus consecuencias en enfermos críticos pueden llegar a ser mortales, advierte.

La parte positiva es que el neumococo se puede prevenir: “tenemos vacunas seguras y eficaces como la conjugada trecevalente que puede prevenir de forma eficaz la neumonía neumocócica por serotipos vacunales”.

Esta vacuna, que puede administrarse en cualquier momento del año, está especialmente indicada “en adultos con enfermedades crónicas -hepáticas, respiratorias, renales, diabetes…-, pacientes inmunodeprimidos y personas a partir de los 60 o 65 años” y es que, apunta, “sólo por el hecho de ser mayor tienen una inmunosenescencia que les vuelve más vulnerables a la infección, es decir, tienen más probabilidades de contraerla y evolucionar mal”.

Meningococo en lactantes

Walter Goycoechea ha explicado cuál ha sido la situación frente al meningococo en los últimos años en nuestro país. Así, en un contexto en el que el serogrupo B siempre ha sido el más prevalente, desde 2016-2017 se había venido registrando un incremento de los serogrupos A, C, W, Y, siendo estos dos últimos especialmente virulentos.

Con la llegada de la pandemia y la instauración de medidas como la distancia social, las mascarillas, el lavado de manos… el número de casos empezó a reducirse aunque, advierte, no así su virulencia. Lo esperable ahora, explica Goycoechea, “es que la incidencia vuelva a incrementarse” y, por ello, es preciso adoptar medidas.

Actualmente, en nuestro país se incluye la vacunación frente a los serogrupos A, C, W e Y del meningococo a los doce años de edad y, en algunas comunidades autónomas, al año. Sin embargo, ha puntualizado, algunas sociedades científicas van aún más allá y recomiendan la vacunación incluso antes.  “De las vacunas que tenemos en el mercado, Nimenrix® se puede utilizar desde las seis semanas.  Vacunando al lactante con una pauta de 2+1, a los 2, 4, y 12 meses, podemos garantizar la protección directa de ese lactante”.

Aunque los casos de enfermedad en el lactante son limitados en el momento actual, para este experto cabe esperar, debido al modelo de transmisión del meningococo, que se incrementen, de ahí que implementar estrategias de vacunación temprana permitiría adelantarse y proteger a los más pequeños casi desde el nacimiento.

Frente al COVID-19

Por último, Raúl Ayala se ha referido a la vacunación masiva frente al COVID-19, algo, ha subrayado, para lo que los centros de salud no están preparados y ha abogado, como ya ha empezado a hacerse en algunas comunidades, por hacerlo en pabellones o estadios. Estos, ha explicado, “son el mejor lugar para vacunar a mucha gente en poco tiempo”, eso sí, “siempre que se cuente con el personal debidamente formado”.

En su intervención ha defendido también que los profesionales que deben vacunar son las enfermeras: “Los que sabemos y los que llevamos poniendo vacunas toda la vida somos los enfermeros. La vacunación no solamente es administrar una vacuna en el deltoides. Tiene un acto prevacunal, en el que hay que tener en cuenta las características de cada paciente y posibles contraindicaciones de la vacuna; un acto vacunal, que hay que llevar a cabo con todas las garantías de higiene y asepsia; y una fase postvacunal, en la que hay que prestar atención a la aparición de cualquier posible complicación que debamos atender”.

Asimismo, ha hecho hincapié en la formación que estos profesionales deben recibir antes de empezar a administrar esta vacuna: “como hemos visto, no es una vacuna cualquiera. Tiene unas características especiales de conservación, manipulación y preparación, por tanto, requiere de una formación específica; la enfermería es un ámbito muy amplio y no todos estamos especializados en lo mismo”

Origen de la información pulse aquí.

Mas información pulse aquí.

El Consejo General de Enfermería pide mascarillas libres de impuestos, con limitación de precio, y rechaza la disputa política en una medida clave para la salud de todos

La Comisión de Sanidad del Congreso rechaza la bajada del IVA para estos productos

 

El Consejo General de Enfermería pide mascarillas libres de impuestos, con limitación de precio, y rechaza la disputa política en una medida clave para la salud de todos

 

  • Tras la votación en contra de la reducción del IVA para las mascarillas FFP2 y FFP3 en la Comisión de Sanidad del Congreso, el órgano de representación de la enfermería española no comprende que se imponga el afán recaudatorio a la salud de la población.
  • “Estas mascarillas son una medida de protección esencial frente al coronavirus y en espacios cerrados con poca ventilación o con alta afluencia, donde el riesgo de la persistencia de aerosoles es más alto lo recomendable es utilizar una mascarilla autofiltrante FFP2, no son un artículo de lujo y desde que se hizo imprescindible su uso hemos abogado por su gratuidad”, asegura Florentino Pérez Raya, presidente del CGE.
  • Según los medios de comunicación que cubren la actividad parlamentaria, los partidos en el Gobierno son más partidarios de limitar su precio, pero no tocar el IVA. Para el CGE ambas medidas no son excluyentes, sino compatibles ante la situación de vulnerabilidad que experimentan muchas familias en nuestro país por culpa de la percusión económica que está teniendo. 

El rechazo de la Proposición No de Ley para instar al Gobierno a eximir del IVA a todas mascarillas -incluidas las FFP2 y las FFP3- resulta incomprensible a ojos del Consejo General de Enfermería. Al tratarse de un producto obligatorio y necesario para frenar los contagios y la expansión del COVID-19, el máximo órgano de representación de las enfermeras españolas no comparte el voto negativo de los partidos del Gobierno, PSOE y Unidas Podemos, pues supone anteponer las medidas recaudatorias a la salud de la población. Estos partidos, según han expresado, abogan principalmente por establecer una limitación del precio de venta al público de este tipo de dispositivos sanitarios. Lejos de luchas partidistas y desde la independencia de ser un organismo que vela por la salud de las personas, creemos que ambas medidas no son incompatibles, sino complementarias y desde hace tiempo se reclama la gratuidad o financiación por parte del Sistema Nacional de Salud.

La evidencia científica actual aconseja que, para abordar la situación epidemiológica en la que nos hallamos, es recomendable el uso de mascarillas autofiltrantes FFP2 en espacios cerrados poco ventilados y donde se produzca una acumulación importante de personas, pues son lugares donde la transmisión del SARS-CoV-2 en forma de aerosol es más elevada.

Debería apostarse por un régimen impositivo que tenga en cuenta la renta y condiciones socioeconómicas de cada individuo como, por ejemplo, no tener trabajo. Es decir, seguir la línea de los medicamentos y productos sanitarios reembolsables. Pero incluso es posible ir más allá y que las mascarillas -de todo tipo- sean gratuitas para las personas más vulnerables y aquellas sin ingresos económicos

“Estas mascarillas son una medida de protección esencial frente al coronavirus, no son un artículo de lujo y desde que se hizo imprescindible su uso hemos abogado por su gratuidad”, asegura Florentino Pérez Raya, presidente del CGE.

La falta de acceso a mascarillas de alta protección por motivos meramente económicos es un problema de salud pública que se traduce en que los usuarios prolongan su vida útil mucho más allá de los aconsejable, o su reutilización excesiva, favoreciendo así el contagio. Por ello, es primordial crear mecanismos que garanticen el acceso a estos productos en función a las necesidades de protección y circunstancias socioeconómicas particulares que pueda tener cada individuo. Según algunas estimaciones, una familia de cuatro miembros puede gastar al año -en estimaciones conservadoras- unos 1.500 euros en mascarillas.

 

Origen de la publicación pulse aquí.

 

El CGE y el INTA presentan una gran revisión documental sobre la relación de los aerosoles con la propagación del COVID-19 y los mecanismos de protección frente a la enfermedad

El CGE y el INTA presentan una gran revisión documental  sobre la relación de los aerosoles con la propagación del COVID-19 y los mecanismos de protección frente a la enfermedad 

 

  • Ambas instituciones han realizado una revisión documental que incluye trabajos nacionales e internacionales sobre el comportamiento aéreo del virus y las posibilidades de transmisión del mismo, que ayudarán a proteger enormemente a la población en general y a los profesionales sanitarios en particular.
  • “Estoy convencido de que las conclusiones de esta investigación van a evitar muchos contagios y puede salvar muchas vidas porque de ellas se deduce cuál es la forma de protección más eficaz en cada entorno sanitario y social”, afirma Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería.
  • “En su conjunto, este libro pretende ser una guía fácil de concienciación en referencia a la posibilidad del contagio por aerosoles y clarificar, a partir evidencias científicas, algunos de los aspectos más relevantes sobre la transmisión del SARS-CoV-2 y que más dudas han generado a lo largo de la pandemia en el ámbito sanitario y social”, comentan los autores del trabajo.

 El Instituto Español de Investigación Enfermera, dependiente del Consejo General de Enfermería, junto al Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA), del Ministerio de Defensa, acaban de lanzar uno de los documentos más completo y detallado elaborado hasta la fecha sobre la transmisión del SARS-CoV-2 por aerosoles, así como las vías para prevenir la enfermedad que ha causado ya casi 70.000 muertes en España y más de dos millones en todo el mundo.

A través del libro blanco “La transmisión del SARS-CoV-2 en aerosol y mecanismos de protección”, ambas instituciones han realizado una extensa revisión documental, que incluye estudios nacionales e internacionales sobre el comportamiento aéreo del virus y las posibilidades de transmisión del mismo. En este sentido, el trabajo tiene como objetivo dar más información sobre el comportamiento de los aerosoles y para la protección de los trabajadores contra los riesgos para su salud y su seguridad, así como adecuar las medidas de protección para la prevención de los riesgos a los que están o pudieran estar expuestos en su trabajo, consiguiendo así poner todas las barreras necesarias para evitar la propagación y frenar la infección.

Tras meses de recopilación de información, el CGE junto al INTA han concluido que “queda demostrado que el SARS-CoV-2 se transmite mediante aerosoles que contienen virus viables generados por la persona infectada, especialmente en espacios cerrados y mal ventilados”.

“El lector tiene ante sus manos una investigación exhaustiva, rigurosa y a fondo sobre el comportamiento del virus, sus posibles formas de contagio, incluyendo los aerosoles y las medidas de protección. Estoy convencido de que las conclusiones de esta investigación van a evitar muchos contagios y pueden salvar muchas vidas porque de ellas se deduce cuál es la forma de protección más eficaz en cada entorno sanitario y social”, afirma el presidente del Consejo General de Enfermería, Florentino Pérez Raya.

Asimismo, apuntan que la evidencia científica reconfirma la importancia de continuar aplicando en nuestro día a día cuatro aspectos fundamentales para la prevención del COVID-19. Distanciamiento físico de al menos 1’5 metros, protección respiratoria con el uso de mascarillas, higiene de manos y desinfección de superficies y ventilación son los puntos a seguir para cortar la expansión del coronavirus.

Este último es esencial, ya que el estudio alerta de que las partículas finas y ultrafinas pueden permanecer en suspensión durante horas en ambientes cerrados y poco ventilados. “Cada vez es mayor la evidencia referente a la transmisión del virus como aerosol submicrométrico; especialmente, se está analizado su capacidad infectiva en espacios interiores donde el virus sí se ha podido mantener viable y suspendido, dispersándose en función de las corrientes de aire y el ambiente del entorno”, apunta el libro blanco. Así lo exponen investigaciones como la de la Universidad de Florida, que realizó un ensayo piloto en el aire y presentó “evidencias de la presencia del virus como aerosol al haber sido localizado a 3 metros de distancia de la zona más próxima de tránsito de pacientes”.

“Desde el Instituto Español de Investigación Enfermera del CGE apostamos desde el primer momento por profundizar sobre otras vías de transmisión además de gotas infecciosas emitidas al hablar, toser o estornudar directamente sobre una superficie mucosa o conjuntiva de una persona susceptible, o por contacto directo con superficies contaminadas, o aquellas producidas durante los procedimientos generadores de aerosoles como se dijo al principio. Debido al elevado número de contagios entre los profesionales que se producían, objetivamos la necesidad de ajustar las medidas de protección al riesgo que suponía el ambiente hospitalario y fue ahí cuando se formalizó la colaboración con el INTA. Ellos compartían la misma inquietud y son los grandes expertos en comportamiento de los aerosoles”, afirman María Enríquez y Guadalupe Fontán, autoras del trabajo.

Los resultados de este estudio suponen un enorme aliciente para lograr que las administraciones sepan actuar y proteger a toda la población, pero en especial a aquellos profesionales que están luchando contra el virus frente a frente. “La creación de este grupo de trabajo nos ha sido muy útil para conocer cómo se comporta este virus y gracias a esta revisión, estamos llevando a cabo estudios de campo, de los cuales esperamos tener resultados muy pronto”, destacan Enríquez y Fontán.

Por su parte, Víctor Archilla y María Sánchez, también autores del documento, comentan que “la generalizada negación inicial sobre la posible viabilidad de la transmisión del virus por aerosoles y las dudas sobre las adecuadas prácticas de protección y prevención del contagio hicieron necesaria una recopilación de los resultados científicos y divulgativos más relevantes para poder poner al servicio de la sociedad una lectura sencilla que ayudara a reconducir conductas y entendimientos”.

 

Contagios en interiores

Para los investigadores, resulta esencial apostar por medidas que minimicen la transmisión de los contagios en los interiores. Así, hacen hincapié en la importancia de aumentar la ventilación o reducir la ocupación de los espacios cerrados; mantener el sistema de ventilación en condiciones óptimas; aumentar la ventilación natural; integrar sistemas de filtración HEPA; mantener los sistemas operando de manera continua durante la ocupación, y dotarse de sistemas de filtración y purificación portátiles en aquellos sitios donde no existen instalaciones de ventilación. También recalcan que, “en lugares cerrados y mal ventilados, la distancia de 2 metros puede ser insuficiente y habría que adoptar otras medidas para reducir el riesgo”.

“Llevamos meses diciéndolo y ahora, con esta revisión, presentamos las evidencias”. La ventilación es primordial para evitar la expansión del virus. Debemos actuar con responsabilidad y aceptar las normas sanitarias porque la bajada de contagios es una tarea común y tenemos que poner de nuestra parte”, afirma Pérez Raya.

En el libro blanco también se explica y se detalla la importancia de las mascarillas, así como la desinfección de superficies. Entre otros asuntos, en cuanto a las mascarillas, se describe qué tipos existen, cómo utilizarlas, quién debe utilizar cada una y cuánto tiempo duran. Aun así, recuerdan que estamos ante una enfermedad con apenas un año de recorrido y los protocolos e investigaciones pueden ir cambiando continuamente.

“Al igual que las nuevas evidencias científicas, esta guía ha estado en continuo cambio y se hacía necesario establecer un final. Este “Libro Blanco” debe ser considerado como una base de información útil, pero viva, que invite a su actualización y anime a la sociedad, en general, a continuar acercándose a los resultados y análisis provenientes de los nuevos estudios que diariamente van apareciendo”, concluyen Víctor Archilla y María Sánchez.

Origen de la publicación pulse aquí.

El Consejo General de Enfermería pide en el 8M acabar con el virus del machismo

El Consejo General de Enfermería pide en el 8M acabar con el virus del machismo

 

  • Con el lema “STOP al virus del machismo”, el Consejo General de Enfermería quiere mostrar en una campaña, con motivo del Día Internacional de la Mujer, 8 de marzo, las reivindicaciones de las enfermeras, un colectivo mayoritariamente femenino. 
  • Bajo el hashtag #STOPVirusDelMachismo, el CGE lanzará el próximo lunes, en redes sociales, mensajes de reivindicación que se centran en acabar con el virus que supone el machismo en nuestra sociedad. 
  • “Aunque queda mucho camino por recorrer, el punto en el que se encontraba la profesión hace unos años no tiene nada que ver con su reconocimiento actual en el sistema sanitario y en la sociedad, es el ejemplo de que las mujeres pueden luchar por sus derechos”, asegura Pilar Fernández, vicepresidenta del Consejo General de Enfermería. 

El Día Internacional de la Mujer coincide con el patrón de la profesión, San Juan de Dios. Por ello, un colectivo mayoritariamente femenino como la enfermería se rebela contra el machismo que miles de enfermeras experimentan a diario en su puesto de trabajo, un auténtico virus contra el que hay que luchar, igual que están haciendo contra el SARS-CoV-2. En una nueva campaña de visibilidad, amparada bajo el hashtag #STOPVirusDelMachismo, el Consejo General de Enfermería lanzará el próximo lunes, en redes sociales, mensajes de reivindicación -tanto en formato imagen como en vídeo– que se centran en acabar con el virus que supone el machismo en nuestra sociedad.

En concreto, se abogará por una conciliación real de la vida laboral y familiar, estar presentes en los lugares donde se toman las decisiones, acabar con los estereotipos sexistas o con los techos de cristal. Reivindicaciones compartidas con las organizaciones feministas, a las que se suman otras propias de la profesión, como pueden ser la visibilidad y el liderazgo enfermero o la conquista de derechos para las enfermeras en todo el mundo.

Como colectivo mayoritariamente femenino, ya que un 85% de sus profesionales son mujeres, la enfermería también quiere recordar que -del mismo modo que la profesión ha luchado por ser reconocida dentro del sistema sanitario-, las mujeres no deben de cesar en su lucha por conseguir unos derechos laborales igualitarios con los hombres. “Aunque queda aún mucho camino por recorrer, el punto en el que se encontraba la profesión hace pocas décadas no tiene nada que ver con su reconocimiento actualmente en el sistema sanitario y la sociedad, es el ejemplo de que las mujeres pueden luchar por sus derechos. No obstante, por desgracia, algunas personas siguen teniendo un concepto trasnochado de las enfermeras como una profesión supeditada a otra antiguamente copada por varones o tienen que aguantar que se dirijan a ellas de forma inadecuada”, explica Pilar Fernández, vicepresidenta del Consejo General de Enfermería.

Sin duda, uno de los principales problemas de las enfermeras, que se ha visto agudizado por la pandemia, es la falta de conciliación de la vida laboral y familiar. Si antes del COVID-19, la organización familiar con turnos cambiantes y precariedad ya era difícil, la grave crisis sanitaria que estamos viviendo ha hecho saltar por los aires cualquier tipo de conciliación. “Las enfermeras dejaron de tener días libres, se acabaron los permisos y vacaciones, alargaron jornadas, todo ello con las clases de los niños suspendidas, lo que ha supuesto un verdadero quebradero de cabeza añadido a una situación ya de por sí angustiosa para miles de mujeres en nuestro país”, subraya la vicepresidenta del CGE. Una situación en la se han visto absolutamente desamparadas, de ahí que aboguen por medidas concretas que favorezcan una conciliación real.

Machismo

Para el CGE, el machismo es un virus contra el que hay que luchar. Para ello, se requiere educar a la sociedad en general y a los pacientes en particular, desde pequeños, porque todavía hoy las enfermeras se enfrentan a comentarios machistas o referencias a su persona como “nena”, “niña”, “guapa” o “señorita”. Habría que recordarles que el trabajo de la enfermería consiste en cuidar y curar al paciente, no en escuchar “impertinencias” de pacientes maleducados que las consideran “sus sirvientas”.

“Nuestra profesión requiere una alta cualificación, una formación académica de cuatro años y dos de especialidad contando en estos momentos con un gran número de profesionales enfermeros con grados de máster y doctorado; una carrera universitaria que requiere una exigente nota de corte para acceder a ella; y unos profesionales que gozan de un gran prestigio en el ámbito internacional”, añade Pilar Fernández. Pese a ello, la presencia de enfermeras en la toma de las grandes decisiones sanitarias sigue siendo meramente testimonial, fruto del techo de cristal que todavía supone ser mujer en muchos ámbitos, algo que es preciso cambiar.

A ello se suma el perpetuo estereotipo sexual vinculado a la profesión que, aunque cada vez en menor medida, se sigue viendo en tiendas de disfraces, en publicidad, en series, películas o en los medios de comunicación.

Cambio de imagen

Durante todo el 8 de marzo, el Consejo General de Enfermería cambiará su logo de azul a morado para mostrar su compromiso con las mujeres y su lucha por los derechos. Además, a lo largo de todo el día se difundirán creatividades en redes sociales y se animará a los usuarios a unirse a la iniciativa, haciendo ver qué es la enfermería en realidad a través de los hashtags #STOPVirusDelMachismo y #enfermeras8M.

 

Origen de la publicación pulse aquí.

Mas información pulse aquí.

 

Seis enfermeras hacen balance del año más duro de su historia: “Se han olvidado de nosotros y seguimos ahí, en la puerta de la UCI y viendo a la gente morirse”

Seis enfermeras hacen balance del año más duro de su historia: “Se han olvidado de nosotros y seguimos ahí, en la puerta de la UCI y viendo a la gente morirse” 

 

  • En el primer aniversario de la pandemia en España, la televisión de las 316.000 enfermeras recuerda cómo fue la llegada de los primeros pacientes y cómo ha cambiado su vida laboral y personal en los últimos 12 meses.
  • “Hemos perdido parte de esa humanización que llevamos muchos años intentando conseguir. Ahora vivimos la enfermedad solos, la muerte se vive sola y es muy duro”, cuentan.
  • El Consejo General de Enfermería (CGE) ha lanzado una revista especial en la que recopilan todos los momentos clave de este año, haciendo hincapié en todas las acciones de salud pública que se han llevado a cabo.
  • “Durante este periodo, la Organización Colegial de Enfermería ha elaborado más de 40 infografías animadas para ayudar a los profesionales y concienciar a la sociedad sobre la mejor manera de abordar la emergencia epidemiológica en cada momento. Las enfermeras lo han dado todo en esta emergencia sanitaria, al principio sin equipos de protección, sufriendo por ellas, sus pacientes y sus familias al volver a casa. Nadie debe olvidar la entrega sin ambages de nuestras profesionales, su vocación inquebrantable”, asegura Florentino Pérez Raya, presidente del CGE.

 

Hace un año que el COVID-19 llegó a la vida de todos los españoles. Lo que parecía lejano, a 10.000 kilómetros de distancia, en China, rápido colapsó los sistemas sanitarios del mundo entero. Los primeros casos en Italia se fueron extendiendo sin control hasta poner en jaque a todos los países. UCIs desbordadas, pasillos repletos de pacientes, falta de equipos de protección para los sanitarios y cambios de procedimientos de un día para otro fueron la tónica habitual en esos primeros días de marzo en los que todo se descontroló.

Ahora, en el aniversario de la llegada del coronavirus a España, seis enfermeras de distintos ámbitos hacen balance sobre cómo afrontaron esa primera ola y cómo les ha cambiado la vida personal y laboral la mayor crisis sanitaria de nuestra historia. En el programa especial de Canal Enfermero (la televisión de las 316.000 enfermeras españolas) por el primer año de la pandemia, todas recuerdan cómo vivieron esa llegada de contagios y de qué manera ha cambiado su percepción del tema en “el año que cambió los cuidados”. “Durante este periodo, la Organización Colegial de Enfermería ha elaborado más de 40 infografías animadas para ayudar a los profesionales y concienciar a la sociedad sobre la mejor manera de abordar la emergencia epidemiológica en cada momento. Las enfermeras lo han dado todo en esta emergencia sanitaria, al principio sin equipos de protección, sufriendo por ellas, sus pacientes y sus familias al volver a casa. Nadie debe olvidar la entrega sin ambages de nuestras profesionales, su vocación inquebrantable”, asegura Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería, que ha agradecido “enormemente a todas ellas su disposición en este año”.

“Si veo ahora las imágenes de cuando el Gobierno anunció el estado de alarma, siento indignación. Me recuerda cómo nos enfrentamos a algo desconocido. Miedo, incertidumbre y no saber cómo se iba a desarrollar todo porque no teníamos las armas suficientes para enfrentarnos a algo de lo que nadie sabía nada. Fueron momentos de terror tanto en el ámbito laboral como en el personal”, afirma Elena Álvarez, enfermera de Urgencias. Cuando los días eran cada vez más duros en los hospitales y centros de salud, y las calles parecían un escenario de película, todas las tardes a las 20.00, la población empezó a aplaudir. Aplausos de aliento y ánimo a todos aquellos que se dejaban la vida atendiendo a los pacientes, muchas veces sin las normas de seguridad suficientes, que poco después se fueron apagando con la relajación de las medidas y que ahora muchas veces parece que ya ni se recuerdan. “Era un reconocimiento al esfuerzo que hacíamos ahí dentro y que nadie veía. Salir a la puerta y ver a todos los vecinos en la ventana y a las fuerzas y cuerpos de seguridad aplaudiendo, nos emocionaba enormemente. Un año más tarde, veo que se han olvidado de nosotros y seguimos ahí, en la puerta de la UCI y viendo a la gente morirse”, comenta Esperanza Galarraga, supervisora de Quirófano.

Mabel Ibarguren, responsable de Enfermería de un centro de salud, opina igual que su compañera y explica que “era emocionante, pero llegó un momento que te cansabas porque veías que la gente se iba relajando. Creo que tuvo mucho que ver las imágenes que no se mostraron y habría que haber enseñado”, admite.

En cuestión de semanas, el sistema tuvo que rehacerse entero. Los hospitales tuvieron que organizarse en tiempo récord para abordar la llegada de centenares de casos cada hora; las residencias se convirtieron en uno de los grandes focos de contagios y muertes, y la Atención Primaria actuó como barrera de contención.

Enfrentándose a una de las tasas de contagios más altas del mundo entre profesionales por la falta de equipos de protección, las enfermeras no dudaron ni un segundo dónde tenían que estar. Aptitud que les ha servido para obtener numerosos reconocimientos, entre ellos el Princesa de Asturias de la Concordia por su gran labor durante la pandemia.

“Se hundía el barco”

“El día a día cambió radicalmente y parecía un escenario prácticamente apocalíptico, las calles vacías, la incertidumbre… Fue una mezcla de pánico, terror y miedo”, cuenta David Delgado, responsable asistencial de un centro sociosanitario, que apunta como “al final todos los protocolos en los que llevábamos años trabajando hubo que rehacerlos”. Elena lo recuerda “como el Titanic”: “Se hundía el barco y no sabíamos que teníamos que hacer; no teníamos ninguna directriz de nadie, andábamos por los pasillos sin saber en qué nos teníamos que basar, a quién teníamos que salvar… porque se morían en los pasillos”.

Pilar Núñez, enfermera de UCI, señala el miedo a lo desconocido. “Lo veíamos en las noticias y en marzo lo teníamos delante. El miedo ha cambiado hábitos en mi vida y de alguna manera lo sigo teniendo ahí. Siempre me ha gustado mucho ir a trabajar, pero es verdad que saber que al día siguiente volvíamos a lo mismo ha hecho que no me apeteciese”, apunta.

Sin lugar a dudas, todas coinciden en que este año les ha cambiado la vida a nivel laboral, pero también personal. “Hemos perdido parte de esa humanización que llevamos muchos años intentando conseguir. Ahora vivimos la enfermedad solos, la muerte se vive sola y es muy duro”, reconoce Esperanza.

Pilar lo cree igual. En su hospital, han pasado de ser una UCI de puertas abierta, donde la familia era una parte de esa atención al paciente, a una atención de guerra. “Una atención de guerra en la que llegaba el paciente, le estábamos poniendo en antecedentes de que le íbamos a dormir para luego despertarle cuando estuviese mejor y sus móviles no paraban de sonar en horas hasta que se acababan las baterías”, puntualiza.

Crecimiento

Carla, matrona y fundadora de Matrona para mí, afirma que esto también le ha dado una enseñanza y le ha ayudado a no conformarse. “Me ha hecho ver que no me podía estancar, había muchas madres y padres que sentían falta de apoyo durante el embarazo y la pandemia me ha dado el empujón para algo que ya tenía pensado, crear una empresa. En seis meses, de estar sola, he pasado a tener más de 55 matronas contratadas y 35 ciudades cubiertas”, explica.

Mabel, aunque admite estar cansada, asegura que la pandemia le ha hecho ver que eligió bien su profesión porque es vocacional, pero considera que es necesario un reconocimiento por todo lo que se está haciendo y “que se nos respete”. Igual que ella opina Esperanza: “Hemos visto que casi valemos para todo, nos pongan donde nos pongan, sacamos el trabajo, pero sí es necesaria una especialización y darle un poquito más de importancia a la salud pública. En el primer mundo, pensábamos que la teníamos ganada y el COVID-19 nos ha hecho ver que no”.

Vacuna

Tras nueve meses de lucha incansable, un avión con las primeras vacunas aterrizaba en España. Araceli Hidalgo fue la primera en recibir la dosis de manos de Carmen Carboné, pero ella sólo era el inicio de una de las campañas de vacunación más ambiciosas de la historia. Unas imágenes que abrieron todos los informativos del día y que suponían el principio del fin; eso sí, un fin que todavía está lejos. “Fue algo muy deseado y esperado. La vacuna del COVID nos ha hecho ver que cuando hay un objetivo se acelera la burocracia”, manifiesta Mabel.

Ahora, todas recuerdan la necesidad de seguir cuidándose, respetando las medidas y siendo responsables. El final está cada vez más cerca, pero ellas son conscientes de que queda mucho. El sistema sanitario y los profesionales están agotados y la lucha contra el COVID-19 es un asunto de todos y todas.

Revista especial de Enfermería Facultativa

Con motivo del aniversario de la pandemia, el Consejo General de Enfermería ha lanzado también una edición especial de su revista Enfermería Facultativa, en la que hacen un recorrido exhaustivo por todos los momentos clave de estos doce meses. Campañas informativas, testimonios exclusivos, reconocimientos a los profesionales… un número para el recuerdo y un homenaje a las 316.000 enfermeras que se pusieron al frente de una crisis que marcará los cuidados para siempre.

 

#UnAñoDePandemia #ElAñoQueCambióLosCuidados

Además de esta edición especial de la revista, desde diarioenfermero.es, y a través de las redes sociales de la Organización Colegial, se difundirá un resumen diario de todas esas iniciativas que han marcado el año de la pandemia. Con los hashtag #UnAñoDePandemia y #ElAñoQueCambióLosCuidados, las enfermeras harán un recorrido por los distintos momentos clave de estos meses y recordarán lo que se vivió, lo que se sigue viviendo y lo que esperan no repetir en un futuro.

 

Origen de la información pulse aquí.

APERTURA DE LA BOLSA DEL INGESA PARA PERSONAL ESTATURARIO TEMPORAL

Ayer lunes el INGESA dio apertura a la bolsa de empleo de personal estatutario temporal de enfermer@s

Todas las personas interesadas en participar en este proceso, y que reúnan los requisitos establecidos en el apartado 1.4 de La Resolución de la Dirección de INGESA de 18 de enero de 2021 deberán inscribirse, completar los datos personales, de contacto, la hoja de autobaremación y los anexos que correspondan a cada categoría en la aplicación informática habilitada por el INGESA.

Los méritos correspondientes a los aspectos formativos serán tenidos en cuenta hasta el último día de plazo de presentación de las solicitudes, es decir, hasta el día 26 de marzo de 2021.

Las solicitudes se realizarán vía telemática, bien a través de la opción certificado digital, bien a través de sistema clave, tal y como se apreciará una vez accedan a registrarse en la Sede Electrónica del Ministerio de Sanidad en la siguiente dirección:

https://sede.mscbs.gob.es/registroElectronico/formularios.htm#idTRAM_BOLSAINGESAMELILLA

Enlaces de interés:

INGESABolsa de Empleo Temporal Melilla

Área de Salud de Melilla

RESOLUCIÓN DE 26 DE FEBRERO DE 2021 DE LA GERENCIA DE ATENCIÓN SANITARIA DE MELILLA POR LA QUE SE ACUERDA LA APERTURA DEL PLAZO DE PRESENTACIÓN DE SOLICITUDES PARA LA INSCRIPCIÓN COMO PERSONAL ESTATUTARIO TEMPORAL EN LA BOLSA DE EMPLEO DE LAS INSTITUCIONES SANITARIAS DEL INGESA EN MELILLA

Manual de Ayuda de Procedimiento

 

Resolución por la que se publica del INGESA la regulación del procedimiento para la indicación, uso y autorización de dispensación de medicamentos y productos sanitarios de uso humano, por los enfermeros y enfermeras en las Ciudades de Ceuta y Melilla.

Resolución de 23 de febrero de 2021, del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria, por la que se regula el procedimiento para la indicación, uso y autorización de dispensación de medicamentos y productos sanitarios de uso humano, por los enfermeros y enfermeras en las Ciudades de Ceuta y Melilla.

Enlace directo al BOE Núm. 50 pulse aquí.

….. 1. Requisitos para obtener la acreditación. Para la obtención de la acreditación para la indicación, uso y autorización de la dispensación de medicamentos y productos sanitarios de uso humano, ya sea para el ámbito de los cuidados generales o de los cuidados especializados, el interesado presentará la solicitud, aportando la siguiente documentación justificativa del cumplimiento de los requisitos exigidos en el artículo 9.1 y, en su caso, 9.2 del Real Decreto 954/2015, de 23 de octubre:

1.a) Para el ámbito de los cuidados generales:
– Título de Graduado en Enfermería, de Diplomado en Enfermería, o de ayudante Técnico Sanitario, o equivalente.
– Documento acreditativo de poseer una experiencia profesional mínima de un año, mediante la certificación acreditativa del período de experiencia profesional de cuidados generales expedida por la empresa o institución empleadora. En caso de que la experiencia mínima de un año resulte de la prestación de servicios en dos o más centros, deberá presentar las certificaciones acreditativas del periodo de experiencia profesional adquirida en cada uno de ellos.
En defecto de no reunir la experiencia profesional mínima de un año, deberá presentar la documentación que justifique la superación de un curso de adaptación para la acreditación de la competencia profesional enfermera para la indicación, uso y autorización de dispensación de medicamentos y de productos sanitarios de uso humano en el ámbito de los cuidados generales.

1.b) Para el ámbito de los cuidados especializados. Además de la documentación justificativa detallada en el epígrafe anterior, referida a la experiencia profesional, que en este caso deben de estar realizados en el ámbito de cuidados especializados o en su defecto al curso de adaptación, deberá aportarse el correspondiente título de Enfermero Especialista a que se refiere el artículo 2.1 del Real Decreto 450/2005, de 22 de abril, sobre especialidades de Enfermería.
El INGESA facilitará a los enfermeros y enfermeras de cuidados generales y de cuidados especializados que no puedan acreditar un año de experiencia profesional, la realización de un curso de carácter gratuito, bien ofertándolo directamente o bien dando plena validez a aquellos impartidos por las comunidades Autónomas o por el Consejo General de Colegios Oficiales de Enfermería de España, siempre y cuando el contenido del curso esté diseñado con arreglo a las especificaciones señaladas en el anexo I del Real Decreto 954/2015, en cuanto al objetivo de la adquisición de las competencias necesarias para que los enfermeros y enfermeras puedan obtener la acreditación indicación, uso y autorización de dispensación de medicamentos y productos sanitarios
de uso humano.

2. Presentación de solicitudes y documentación. La presentación de la solicitud irá dirigida al Director del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (calle Alcalá, n.º 56, 28071 Madrid), en cualquiera de estos sitios:

b) En las Direcciones Territoriales del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria de las
Ciudades de Ceuta y Melilla.

d) En cualquiera de los lugares establecidos en el artículo 16.4 de la Ley 39/2015, de 1 de octubre, de Procedimiento Administrativo Común de las Administraciones Públicas.

A la citada solicitud se acompañará copia autenticada de la documentación que acredite los requisitos exigidos, responsabilizándose los interesados de la veracidad de la misma.

No obstante, podrá ser de aplicación lo establecido en el artículo 28.5 de la Ley 39/2015, de 1 de octubre, del Procedimiento Administrativo Común de las Administraciones Públicas.
Las solicitudes de acreditación se presentaran durante el último trimestre de cada año.

A tal efecto, se publicará con carácter anual, Resolución del Director, en la que se indica la apertura de plazo a estos efectos. Aquellas que se presenten fuera del indicado, se acumularán para su resolución con las presentadas en el año siguiente ….

Tercero. Efectos.
Esta Resolución tendrá efectos desde el día siguiente al de su publicación en el «Boletín Oficial del Estado».
Las personas relacionadas en el anexo I de esta Resolución podrán hacer la indicación, uso y autorización de dispensación de medicamentos y productos sanitarios de uso humano, desde el día siguiente a su publicación en el «Boletín Oficial del Estado», siempre y cuando se cumpla con las condiciones y exigencias contempladas en el referido Real Decreto 954/2015, de 23 de octubre, especialmente, las referidas a las guías clínicas y protocolos elaborados y aprobados por la Comisión Permanente de Farmacia, y sin perjuicio de lo señalado en el apartado cuarto….

 

ANEXO I
Relación de los Enfermeros del ámbito de los cuidados generales y Enfermeros del ámbito de los cuidados especializados que cumplen los requisitos para la acreditación de oficio en aplicación del apartado segundo y, en consecuencia, quedan acreditados para la indicación, uso y autorización de uso y autorización de dispensación de medicamentos y productos sanitarios de uso humano, según consta a fecha 1 de febrero de 2021 en el sistema informático de la base de datos de gestión de personal del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria

Gerencia Atención Sanitaria Melilla (01/02/2021)

Las enfermeras dan las claves para comprar la mascarilla correcta

Las enfermeras dan las claves para comprar la mascarilla correcta

 

  • ¿Son todas las mascarillas adecuadas para cada situación? ¿En qué debemos fijarnos para comprar? Ante la reciente regulación del Boletín Oficial del Estado (BOE) de los requisitos para comercializar las mascarillas higiénicas, desde la Organización Colegial de Enfermería se ha elaborado una infografía para resolver estas y otras dudas. Así, las enfermeras ofrecen a la población las claves para ayudar a decidir sobre la compra más segura posible en cada caso.
  • “Es importante interiorizar que la protección depende de la situación concreta. Debemos evaluar el riesgo de transmisión del SARS-CoV-2, siendo mayor en espacios cerrados con poca ventilación, en los que sea más complicado mantener la distancia de seguridad y donde se realicen procedimientos que aumenten la generación de aerosoles”, explica Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería.
  • El BOE también establece una serie de obligaciones de información al consumidor. Entre otras exigencias, determina que las mascarillas higiénicas siempre deberán especificar que no son Equipos de Protección Individual (EPI) para dejar claro que no están recomendadas en situaciones de alto riesgo de transmisión del virus.
  • A pesar de que también se ha entrado a hablar sobre accesorios o mascarillas transparentes, las enfermeras consideran insuficiente esta regulación. “Las recomendaciones son escasas. Haría falta más información que ayudara al consumidor a elegir mascarillas transparentes o accesorios adecuados. Reclamamos una regulación más específica al respecto”, asegura Pérez Raya.

 Ya es oficial, las mascarillas higiénicas cuentan con una regulación normativa en el mercado. Así lo ha establecido el Boletín Oficial del Estado en la Orden CSM/115/2021 de 11 de febrero, por la que se establecen los requisitos de información y comercialización de este tipo de mascarillas. Una regulación muy esperada que ofrece las claves sobre qué deben incluir las mascarillas higiénicas. Pero ¿la población en general sabe por qué o para qué comprar ciertas mascarillas? ¿cuál es la indicada para cada situación? ¿en qué debemos fijarnos para saber si la mascarilla protege para el lugar o la situación concreta donde la vamos a utilizar? Para resolver estas y otras dudas, desde la Organización Colegial de Enfermería, cumpliendo con su misión informativa a los ciudadanos y los profesionales, se ha elaborado una infografía donde se desglosan las claves para que un comprador sepa en qué debe fijarse para saber que está adquiriendo la mascarilla correcta.

 

Dónde mirar

Las enfermeras consideran importante recalcar dónde se tienen que buscar las indicaciones técnicas que certifican que las mascarillas siguen las pautas normativas exigidas por el Gobierno. De esta manera, indican, las mascarillas higiénicas tienen la regulación en el empaquetado que las recubre, las quirúrgicas generalmente en la caja y las autofiltrantes directamente sobre el producto y en todas ellas debe aparecer en la ficha técnica.

 

Claves para la compra 

Para elegir la mascarilla apropiada para cada situación, se deben tener en cuenta, entre otros aspectos: la Eficacia de Filtración Bacteriana (BFE), el grado de respirabilidad, el sentido de filtración de la mascarilla y que sean fabricadas según estándar.

A pesar del que el BOE, en este caso, sólo se refiere a las mascarillas higiénicas, la Organización Colegial de Enfermería incluye en esta nueva infografía también las recomendaciones para las conocidas como autofiltrantes y las quirúrgicas, para ayudar a comprar las que siguen las regulaciones establecidas para ambas. “Es importante interiorizar que la protección depende de la situación concreta. Debemos evaluar el riesgo de transmisión del SARS-CoV-2, siendo mayor en espacios cerrados con poca ventilación, en los que sea más complicado mantener la distancia de seguridad y donde se realicen procedimientos que aumenten la generación de aerosoles”, recalca Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería.

Las mascarillas autofiltrantes -FFP3 y FPP2- son las que mayor protección ofrecen ya que cuentan con una eficacia de filtración bacteriana mayor, además, el sentido de filtración de la mascarilla es tanto de dentro hacia fuera como de fuera hacia dentro. Son consideradas Equipos de Protección Individual (EPI) y el consumidor, para saber que está adquiriendo una que cumple las garantías, deberá comprobar si -directamente en el producto- aparecen la especificación UNE-EN 149:2001 + A1 y las letras CE seguidas de cuatro dígitos. Estos datos también deben aparecer en la ficha técnica. Están recomendadas para situaciones donde haya mayor riesgo de transmisión de aerosoles ya sea por tratarse de un lugar cerrado, por estar poco ventilado o porque se realicen actividades o técnicas que los generen en mayor medida. Pero las enfermeras puntualizan “las FFP3, deben ser priorizadas para personal sanitario que se expone a técnicas que generan directamente aerosoles. Las FFP2 están recomendadas para personal sanitario o esencial que realice su actividad con pacientes COVID-19 o sospechosos y para población en general en ambientes donde haya mayor riesgo de transmisión de aerosoles”.

Por otro lado, en la información gráfica de la Organización Colegial de Enfermería, se pueden especifican los tipos y grado de protección de las mascarillas quirúrgicas. Esta clase se consideran productos sanitarios y hay tres tipos. En este caso, tal y cómo se explica desde la Organización Colegial de Enfermería, debemos acudir habitualmente a la caja (o la ficha técnica) para ver si se refleja en ella la especificación UNE-EN 14683:2019 AC y las letras CE. “Estos productos tienen menor protección de fuera hacia dentro, pero una gran protección de dentro hacia fuera”, puntualiza Pérez Raya.

Y, por último, las enfermeras incluyen la información relativa a las mascarillas higiénicas. Lo primero que hay que tener en cuenta y que refleja el Boletín Oficial del Estado es que estas mascarillas no son EPI y así deben reflejarlo en su etiquetado. En esta opción, hay que revisar la ficha técnica o el empaquetado del producto donde aparezca la información que garantice que estos cobertores faciales cuentan con la protección indicada para ser considerados legalmente como mascarilla higiénica. En la nueva regulación se especifica que deben reflejar la especificación UNE 0064 (0064-1 adultos; 0064-2 niños), la 0065 o su equivalente europea CWA 17553, además deben detallar si son de un solo uso o reutilizables y para aquellas que lo sean se exige que aparezca el número máximo de ciclos de lavado que mantengan las características, así como el método de lavado y secado. Las enfermeras dejan claro que “estas mascarillas están recomendadas especialmente para población en general en sitios de bajo riesgo de transmisión del virus”, concreta Pérez Raya.

 

Accesorios y mascarillas transparentes 

Por primera vez, una regulación del Gobierno se refiere a los accesorios asociados a las mascarillas. También se ha incluido en el Boletín Oficial del Estado una mención a las mascarillas transparentes, indicadas para personas que necesitan leer la expresión de la cara por discapacidades comunicativas. En este aspecto la opinión de las enfermeras españolas es clara. “Las recomendaciones son escasas. Haría falta más información que ayudara al consumidor a elegir mascarillas transparentes o accesorios adecuados. También sería necesario que el BOE explicara a qué tipo de accesorios hace referencia. Reclamamos una regulación más específica al respecto”, concluye Pérez Raya.

Información original pulse aquí.

 

La patronal de la Sanidad Privada, ASPE, niega la calidad y seguridad de los cuidados en sus pacientes al rechazar la Ley de Ratios de Enfermería

La patronal de la Sanidad Privada, ASPE, niega la calidad y seguridad de los cuidados en sus pacientes al rechazar la Ley de Ratios de Enfermería

 

  • El presidente de Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE) rechazó en una reunión de la CEOE la futura Ley que establece un número de enfermeras adecuado a las necesidades de los pacientes y acorde a la media europea. 
  • La evidencia científica demuestra que una ratio adecuada de enfermera/paciente mejora la supervivencia de los pacientes, su seguridad, su media de estancia hospitalaria y la calidad de su asistencia. En definitiva, más enfermeras supone más vidas salvadas y menos sufrimiento para el paciente.
  • La carencia de enfermeras está especialmente agudizada en la Sanidad Privada y pone en peligro a millones de pacientes.
  • “La pandemia ha puesto en evidencia que faltan decenas de miles de enfermeras en España y su deficiente distribución por CC.AA. Por ello, es incomprensible que la sanidad privada reniegue de una Ley de Ratios de Enfermería que viene a salvar vidas y a garantizar la seguridad y el bienestar de los pacientes. No entendemos esta postura, especialmente cuando viene del propio sector sanitario”, asegura Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería.

 

Las últimas declaraciones del presidente de la Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE), Carlos Rus, en la Comisión de Sanidad de la CEOE sorprenden e inquietan al Consejo General de Enfermería, que quiere expresar su incredulidad ante el rechazo de ASPE a la Ley de Ratios, una medida legislativa que establece un número mínimo de enfermeras en relación a la población que deben atender. En un país que se halla a la cola de Europa en enfermeras por habitantes sorprende que la patronal de la Sanidad Privada rechace una medida que redunda en el bienestar y la calidad de los cuidados que reciben los pacientes. Cabe recordar que numerosos estudios demuestran una relación inversamente proporcional entre el número de enfermeras y los fallecimientos en cualquier centro sanitario.

Para el presidente del Consejo General de Enfermería, Florentino Pérez Raya, resulta absolutamente incomprensible la postura adoptada por ASPE porque va en contra de las necesidades asistenciales de los pacientes e incluso de su seguridad y calidad asistencial. Y en este sentido, el presidente de las 316.000 enfermeros y enfermeras ha recordado que “existe numerosa evidencia científica que demuestra que disponer de una ratio adecuada de enfermera/paciente mejora la supervivencia de los pacientes, así como su seguridad, su media de estancia hospitalaria y la calidad de su asistencia. En definitiva, más enfermeras supone más vidas salvadas y menos sufrimiento para el paciente.

También genera estupefacción que el señor Rus asegure que es inasumible para la Sanidad -ni pública, ni privada- contar con las enfermeras que se necesitan. ¿Queda en un segundo plano el bienestar de los pacientes? o ¿prefiere que su país esté a la cola de Europa en este terreno? La prioridad debe ser la calidad asistencial y la seguridad de los pacientes, y para ello es clave mejorar las ratios de enfermeras por paciente en el conjunto de la sanidad española, y en concreto en la sanidad privada. Que la ratio de enfermeras se ajuste a las verdaderas necesidades de cuidados y el nivel de dependencia que presentan los pacientes.

No son pocas las enfermeras que trabajan en el sector privado que atestiguan que forman parte de plantillas exiguas o reducidas a la mínima expresión, sin posibilidad de cogerse permisos y con una remuneración casi siempre inferior a la de sus compañeras que ejercen en la sanidad pública.

“La pandemia ha puesto todavía más en evidencia que faltan decenas de miles de enfermeras en España y que su distribución no es nada equitativa por comunidades autónomas y resulta del todo incomprensible que la sanidad privada reniegue de una Ley de Ratios que sólo garantiza la seguridad y el bienestar de los pacientes, además de una distribución más proporcional de las enfermeras.” asegura Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería.

El presidente de ASPE se escuda en un argumento erróneo, que en las cifras de enfermeras en muchos países europeos están infladas clasificando como “enfermeras” a profesionales que en España no serían consideradas como tales. “Esta afirmación no se sustenta con la realidad. Resulta lamentable que los representantes de la sanidad privada, una parcela fundamental de este país, un sector empresarial fuerte y que está dándolo todo en la lucha contra la pandemia, reaccionen contra una iniciativa legislativa que beneficia a la sociedad en su conjunto. Es el momento de reflexionar y que expliquen sus argumentos para preferir seguir teniendo un número insuficiente de enfermeras para cuidar a sus pacientes y garantizar su seguridad”, añade Pérez Raya.

“Estamos convencidos de que muchas de las entidades y empresas que se agrupan bajo la Alianza de la Sanidad Privada no comparten los planteamientos de su presidente, porque las cifras son las que son y negar esa realidad no le hace ningún bien a la Sanidad en su conjunto. Asimismo, quiero reiterar el apoyo y compromiso del Consejo General de Enfermería con la Sanidad Privada y, por supuesto, con los miles de enfermeras y enfermeros que hacen un gran trabajo en este sector que es clave para la sanidad del país.

Enlace de interés pulse aquí.

Enlace de origen pulse aquí.